Atasco en San Mamés

Pep Guardiola continúa sin encontrar la fórmula para que su equipo muestre una cara tan diferente a la ofrecida en el Camp Nou. Ayer una vez más, el Barcelona volvió a atascarse, sin crear ocasiones de peligro, y con muchas dificultades para llegar a la portería de Iraizoz. Con esta ya son tres los partidos consecutivos lejos de la ciudad condal, en los que el Barça no pasa del empate, y esta semana reciben al Madrid. Algo tiene que cambiar.

Daniel Lobo Ojeda / Foto: prisacom / as.com

Los jugadores blaugrana realizaron un partido muy flojo en la catedral del fútbol. Desde el comienzo el Athletic empezó a complicarle las cosas, con una alineación preparada para destruir el juego azulgrana. Con el paso de los minutos el Barça se hizo dueño del balón, y el conjunto local se echó un par de metros hacia atrás, aguantando las acometidas.

Messi dispuso de la ocasión más clara de su equipo durante el partido, al quedarse sólo en un mano a mano con Gorka, pero el portero estuvo muy acertado y desbarató la ocasión. El jugador argentino era de los mejores del encuentro, pero no tenía la chispa definitiva para adelantarse en el marcador. Más tarde en otra jugada individual de Messi, tras aguantar las faltas de Amorebieta, consigue levantarse, y con el exterior pone un centro medido para Xavi, que inexplicablemente sólo en el segundo palo manda el balón desviado. El Barça no aprendía de sus errores que le hicieron dejarse puntos en jornadas anteriores y desperdiciaba claras ocasiones de gol.

Justo antes del descanso, tras un córner, Yeste recoge el balón suelto, enviando un gran centro al área, que conecta con la cabeza de Javi Martínez, pero el jugador bilbaíno no acierta a rematar a portería. En el segundo tiempo el guión parecía no cambiar, hasta que tras un gran pase de Xavi por en medio de varios defensas, encuentra a Alves que cruza la pelota delante del portero para marcar el 0-1. El Barça había conseguido lo más difícil, a pesar de haber disminuido su juego en el segundo tiempo, y ahora tocaba la pelota con más criterio, tratando de buscar espacios, pero la historia se volvió a repetir.

Tras un balón largo que peina un jugador del Athletic, el cuero le llega a Toquero dentro del área, que había entrado hacía escasos minutos, y con un gran derechazo manda el balón al fondo de las mallas, lejos del alcance de Víctor Valdés. Con el gol el equipo culé se precipitó, y se volvió loco para intentar ganar el encuentro.

Al final otro empate, que pone líder al Real Madrid a siete días de disputarse el clásico en el Nou Camp. Guardiola deberá de tocar algunos hilos dentro de su plantilla para que este equipo vuelva a jugar como lo hacía, y corregir algunos errores defensivos, que están siendo una de las parcas azulgrana en las últimas jornadas.